Me enamoré de esta bebida en mi primer viaje a India.
Un diciembre hace mas de seis años, llegaba por primera vez a un invierno crudo.
De madrugada al salir del aeropuerto, recuerdo la niebla y el frío y a un señor abrigado vendiendo “chai” en los arribos con un carrito ambulante…ese fue mi primer contacto con el masala chai.
Recuerdo la extraña mezcla de sensaciones que sentí.. no podría definir si fué estimulante o una experiencia reconfortante y de bienestar única.
El té Chai es originario de la india, especificamente del sur y se caracteriza por la intensidad de su sabor y perfume producto de la intensa combinación de especias que lo vuelven único.
Es también una tradición en la medicina ayurvédica, y personalmente una adicción que disfruto dos veces al día.
Los ingredientes (en la india se consiguen en cada esquina) son muy baratos y rendidores:
- Té negro o verde ( 2 cucharadas)
- ½ Cucharada de raíces de Jengibre
- ½ rama de canela
- 1 semilla de Cardamomo
- 1 semilla de clavo de olor
- 3/4 taza de agua
- 1/2 taza de leche (puede ser leche de soya, coco o almendra)
- 3 bayas de pimienta
Preparación:
- Moler las bayas de pimienta, el cardamomo (sin la cascara) y el clavo de olor.
- Ponemos en una olla el agua junto con la leche y lo ponemos al fuego.
- En cuanto esté hirviendo, poner el cardamomo, clavo, canela, y las bayas de pimienta.
Al segundo hervor, agregar el Té negro y media raíz de gengibre (en general se raya)
Agregar azúcar a gusto.
Dejar a fuego lento por 5 minutos removiendo de vez en cuando.
- Colar en una taza y tomar. (DEJAR entibiar y reposar unos dos minutos)
En la región de Kachemira, (norte de India) esta receta varía cambiando el Té negro por Té verde, el sabor se vuelve mas ácido. (me quedo con el Té negro, que cuánto menos procesado y más natural esté, más intenso será el sabor y no se perderá frente a tantas especias dominantes)
Como consejo, no dejen hervir mucho tiempo en el segundo hervor, si el té se quema, se vuelve amargo y contamina los otros sabores. 🙂